Antes y después: La transformación de una madrina

Para obtener el ‘look’ con el que siempre hemos soñado en una ocasión especial, hay que seguir un proceso para el que Ángela Serrano está sobradamente preparado. Así lo hizo Mari Cruz, que confió en nuestra boutique desde el principio para ser la madrina en la boda de su hermano y que aceptó el reto para que todos podáis apreciar la importancia de un asesoramiento integral.

Os contamos el proceso que seguimos, adaptándonos en todo momento a las necesidades de nuestra clienta.

VESTIDO

Seleccionamos un vestido de alta costura de la diseñadora Amaya Arzuaga para ofrecer un look distinguido por su elegancia y divertido por el diseño. Eran las claves principales para ocupar un puesto tan relevante como es el de una madrina joven.

Desde el primer momento, hemos pensando mucho en su fisionomía. Es una mujer muy alta y estrecha de hombro, por lo que necesitamos dar volumen en la zona superior para poder compensar y estilizar su figura.

Por ello, nos decantamos por este vestido en un color muy actual y fresco, verde agua que acompañamos con un contraste en negro y nude para aportar originalidad y fuerza.  Esta selección de colores se realizó pensando en sus rasgos físicos,  son discretos y necesitan fuerza a través del color.

La pieza superior de este vestido, una capa de volantes al bies en un tejido muy especial, confeccionada en punto elástico perforado y gomaespuma, que intercalan los colores anteriormente relacionados (verde agua, negro y nude) y que cubre inteligentemente su figura enfundada en un vestido palabra de honor en punto de seda elástico color verde agua.

COMPLEMENTOS

Una madrina siempre se distingue por el detalle que puede llevar en el pelo, como puede ser la mantilla, señal inequívoca de que es la madrina. Pero en este caso a Mari Cruz le hacía mayor, gesto que nos siguió afianzando en el modelo de vestido seleccionado, imposible de combinar con mantilla.

Por eso nos decantamos por un tocado joya diseñado por Benjamín  Bulnes, confeccionado en cera de imaginería y perlas, todo tintado a mano. Sin duda, una de las mejores piezas que la distingue y que encontrarás en exclusiva para Jaén y provincia en Ángela Serrano.

  

Mar Cruz lleva como complemento un ‘crunch’ en negro con toques de strass y zapatos en nude, mismo tono que uno de los volantes.

MAQUILLAJE

En Ángela Serrano estamos seguros que su imagen y transformación no dejara a nadie indiferente. Mari Cruz es una mujer que a diario no se arregla demasiado. Es fresca, natural, suele llevar la cara lavada. No es la primera vez que la vestimos y ahora hemos puesto todos nuestros sentidos.

Para su transformación estética hemos confiado en el Gabinete de Peluquería y Estética de Carmen González.

Teniendo en cuenta la modelo y su vestido, se estudia el tipo de maquillaje que mejor le irá. Se miran sus volúmenes y lo que se quiere resaltar de ella. Al principio se hace estudio de cejas, de su morfología. La forma de las cejas es importantísima para el rostro. Y después es preciso dar fuerza a su mirada, a sus ojos. En este Gabinete, Carmen siempre pone el tono de maquillaje de un tono más al natural de la piel de cada persona. Y luego aplica correcciones, claros y oscuros y potenciando la mirada, otorgándole fuerza y viveza al ojo. En este caso, se han utilizado tonos verdes oliva claritos, que van fenomenal al ojo y al tocado y que otorgan un punto de luz debajo de la ceja. Se trata de un difuminado, degradado, no de un color intenso, con el que conseguir darle darle dulzura a su mirada. El color de ojos marrón verdoso de Mari Cruz junto al tono del maquillaje consigue darle fuerza y dulzura.

Las pestañas, igualmente, potenciadas. A nuestra clienta se le ha aplicado unas pestañas postizas muy naturales. Ella tiene una pestaña bonita y densa, que maquillándola se quedaría bonita, pero con una postiza se ve el ojo muchísimo más natural. Cuanto más marcado, más bonito. Aunque eso sí, siempre hay que difuminarlo, para que ella se encuentre a gusto, aunque esté con fuerza y marcado.

También los labios tienen su esencia. Hay que darles pequeñas correcciones para hacer el labio perfecto. En este caso, se ha aplicado un rojo no muy intenso, pero sí que hay que hacer el rojo muy perfecto, con correcciones uno o dos milímetros sobre su labio, no más. «El labio rojo es la belleza por antonomasia», cuenta Carmen.

Previamente a todo ello, es muy importante saber el color del vestido y los complementos. Antes de empezar, preguntan qué vestirá e incluso piden una foto para que el maquillaje consiga ser parte de un conjunto, de un todo. «Un buen maquillaje con un buen peinado es el mejor complemento para un gran vestido«, resalta Carmen.

PEINADO

La capelina superior del vestido le da un volumen importante que hay que compensar con el peinado. Por eso, se ha diseñado un peinado muy arriesgado, que va en un recogido alto y simulando mucho la forma de los volantes al bies de la capelina.

La madrina llevará un moño con mucha onda para darle fuerza en la raíz, ya que los ojos y labios piden un peinado con fuerza. Arriba lleva bastante volumen, sobre todo flequillo porque le marca muy bien en sus facciones. A la vez que lleva los ojos marcados, el flequillo también da fuerza. Y todo ello puede combinarse perfectamente con un tono desenfadado, soltando un poco mechones por delante. Se trata de un moño no muy formal. Aunque es bastante elaborado, el toque de frescura de no enlacar mucho y que no sea muy tirante le da un toque más juvenil.

FOTOGRAFÍA

En este proceso de cambio contamos con Malephotography, quien supo reflejar a través de su objetivo la importancia de llevar un buen vestido, de que un maquillaje realce ese vestido y de que un peinado sea el complemento ideal a todo el conjunto. A través de las bellas fotografías que veis, podéis daros cuenta del cariño y pasión que pusimos en cada uno de los pasos hasta que Mari Cruz se convirtió en una perfecta madrina de boda.

Muchas gracias a todos los que estuvieron presentes y lo que hicieron posible este cambio. Esta es nuestra verdadera forma de vida, la de ver la moda a través de los ojos del cliente y ofrecerle nuestro asesoramiento y mejores ‘looks’ para que se sientan especiales cada vez que los lleven.

¡Aquí tenéis el antes y el después! Para que podáis observar cómo cambia una persona  con el vestido, el maquillaje y el peinado más adecuado para ella, después de un asesoramiento integral.