¡Hola, amigos! Estamos ya en plenas fiestas navideñas, llenas de eventos, celebraciones y, como no, moda. En este post, sin embargo, queremos hablaros más bien de los primero. De las reuniones en las que se unen durante unas horas familiares y amigos para festejar que es Navidad y que pronto llegará un Año Nuevo. En Ángela Serrano siempre nos han gustado estas fechas y, por eso, siempre hemos procurado vivirlas de una forma muy especial. Este año, además de la cena con nuestros compañeros de la boutique, también hemos querido dar un pasito más y celebrar una día para recordar con familiares y amigos. Así es que pusimos toda nuestra maquinaria al servicio de la creatividad y quisimos sorprenderlos con una comida navideña de lo más singular.
Los preparativos corrieron a nuestro cargo, pero lo más emocionante fue que los invitados solo sabían lo justo. No quisimos darles mucha información para que la expectación fuera máxima. Así, les fuimos enviando mensajes para saber qué fecha les vendría bien. Una vez que concretamos un día y hora y que confirmamos su asistencia, continuamos con nuestros preparativos. La ocupación fue total y tuvimos la suerte de que casi todos los amigos y familiares pudieron acompañarnos.
En esta celebración, no podía faltar, por supuesto, un guiño importante a la moda. Aunque cada invitado era libre de llevar el ‘look’ que quisiera en esta gala ‘deluxe’, les hicimos unas sugerencias. El ‘dress code’ para ellas, invirtiendo los papeles porque, como siempre, son las chicas las que llevan los pantalones. Los hombres, por su parte, serían los encargados de servir la elegancia de la Navidad, para lo que sugerimos camisa blanca.
Una vez concretado el estilo, tan solo tenían que decirnos su ubicación una hora antes del tiempo indicado para la comida. Sin decir nada más, lo dejamos todo abierto, para que los invitados tuvieran tiempo de darle a la imaginación. Por eso, fue espectacular ver sus caras de sorpresa cuando pasamos a recogerlos en los puntos que nos habían indicado en una furgoneta especialmente decorada para este tipo de ocasiones. Comodidad máxima en su interior, buena música navideña y bebida para recorrer las calles de Jaén recogiendo a los invitados. ¡La diversión ya había empezado en el interior!
Siguiendo con nuestro mutismo sobre lo que iba a ocurrir después, tras recogerlos a todos, llegamos a la Casería de Las Palmeras, en la que nos habían preparado, por indicación nuestra, una decoración diferente, exclusiva, especial. No faltaba detalle. Al estilo japonés, los comensales se sentaron alrededor de una gran mesa cuadrada en la que todo invitaba a una magnífica velada. La exquisita comida, el perfecto ambiente y, sobre todo, la mejor compañía.
Nuestro mejor regalo fue la cara de fascinación de nuestros amigos, que agradecieron la organización de un evento trabajado con tanto cariño y con el añadido del misterio. Para nosotros, fue un extraordinario día para disfrutar de la gente más cercana a nosotros y de poder modelar una fiesta pensando en sus gustos y sus deseos.
Vistos los resultados, seguro que no será la última fiesta que organicemos. ¡Os iremos contando mucho más en nuestro blog!